El FMI avisa de que la subida de precios de los alimentos seguirá disparada. (Foto: Envato)

Subida disparada de precios de los alimentos, el aviso del FMI

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Se ha dado a conocer el dato preliminar de inflación en la zona euro y las previsiones apuntan a un pequeño respiro en el rally del IPC en Europa, que no ha parado de avanzar desde que comenzase el año. Un efecto base menor en junio y una leve desaceleración del precio de los alimentos (para los consumidores) podrían detener este mes la racha de subidas de la inflación.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) cree que los precios de los alimentos vivirán un nuevo repunte que llegará al consumidor durante este año y el próximo, afectando al IPC a nivel global.

Christian Bogmans, Andrea Pescatori, y Ervin Prifti, economistas del FMI, publicaron una nota en la que analizan qué está pasando con los alimentos y lanza sus propias previsiones para el precio de este componente tan importante en la cesta de la compra de los consumidores. 

"Aunque los precios de los alimentos  se han moderando recientemente, esto podría cambiar en los próximos meses. Dicho cambio se sumaría a los altos precios que los consumidores ya han vivido", indicaron y señalaron que aunque la producción de cereales y otros alimentos están alcanzando niveles récord, su uso también se está intensificando.

Ahora, el FMI habla de cuatro factores para explicar este aumento en el precio de los alimentos. La primera es la inflación en los alimentos, que ya subía antes de la pandemia. Durante el verano de 2018, China se vio afectada por un brote de peste porcina africana, que acabó con gran parte sus piaras de cerdos, que representaban alrededor del 50% de todos los cerdos del mundo.

Los precios de la carne de cerdo en China alcanzaran máximos históricos a mediados de 2019, lo que generó un efecto dominó en los precios de la carne de cerdo y otras proteínas animales en muchas regiones del mundo. Esto se vio agravado por la introducción de aranceles de importación chinos sobre la carne de cerdo y la soja estadounidenses durante la disputa comercial entre EEUU y Pekín.
Un mayor consumo humano, la estrategia de acumulación de grano de algunos países y la demanda para alimentar a animales domésticos y de granja están entre los factores que están impulsando los precios internacionales de los alimentos. Sin embargo, esta tendencia en los alimentos internacionales solo está empezando a trasladarse a los precios domésticos que paga el consumidor". 

También los primeros confinamientos y las interrupciones de la cadena de suministro provocaron un aumento en los precios de los alimentos para el consumidor. Al comienzo de la pandemia, las interrupciones de la cadena de suministro de alimentos, el cambio de hábitos de las familias y la acumulación de existencias de los consumidores (junto con una fuerte apreciación del dólar estadounidense) provocaron una subida en los índices de precios de los alimentos al consumidor en muchos países.

Otro factor es el aumento considerable de los costes de envío y transporte. Las tarifas de flete marítimo, medidas por el Baltic Dry Index se han incrementado entre 2 y 3 veces en los últimos 12 meses, mientras que el aumento de los precios de la gasolina y la escasez de chips semiconductores de camiones en algunas regiones están elevando el coste de los servicios de transporte por carretera.

Por último, los precios de los productores de alimentos a nivel mundial tocaron máximos. Desde que tocaran mínimos en abril de 2020, los precios internacionales de los alimentos (desde el punto de vista de los productores) han aumentado en un 47,2%, alcanzando sus niveles (reales, es decir, descontando la inflación) en siete años, mientras que sin descontar la inflación (dólares corrientes) están en el nivel más alto de su historia. Entre mayo de 2020 y mayo de 2021, los precios de la soja y el maíz aumentaron en más del 86 y 111%, respectivamente.

Por último, la fuerte demanda de biocombustibles ha puesto más presión sobre la demanda especulativa por parte de los traders y otros agentes. A esto último hay que añadir las restricciones a la exportación en algunos país, un factor adicional que respalda los precios de producción mundiales.

"Un traspaso del 20% (13% en el primer año y 7% en el segundo) implicaría, por tanto, un aumento en la inflación de los precios de los alimentos al consumidor de aproximadamente 3,2 puntos porcentuales y 1,75 puntos porcentuales en promedio en 2021 y 2022, respectivamente. No obstante, se podría sumar un punto porcentual adicional a la inflación mundial de alimentos este 2021 por el encarecimiento del transporte", dijeron los economistas. 
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