Sánchez y Calviño menos optimistas con la previsión de crecimiento
El Gobierno finalmente rebajó su previsión de crecimiento en 3,3 puntos, del 9,8% este año al 6,5%. Así lo declaró la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, quien también ha anunciado que para 2022 el Ejecutivo espera que el PIB crezca un 7% y el paro vuelva a su nivel precrisis, del 14,1%.
Para este año contempla un desempleo del 15,2%, curiosamente mucho mejor al 16,9% que preveía antes. Como explicó Calviño, ello se debe a que las estimaciones contemplan que se alarguen los ERTE durante todo el año, lo que reducirá el aumento del paro en 2021. Estas serán las previsiones que acompañarán al Programa de Estabilidad que se enviará a Bruselas a finales de abril.
Calviño achacó estos problemas a la evolución de la pandemia unido al ritmo de la vacunación. Esto ha provocado un menor crecimiento ante la tercera ola y, por tanto, ha hecho mella en las previsiones del Ejecutivo que, en octubre de 2020, esperaba un crecimiento del 9,8%, del 7,2% sin incluir el impacto de los 27.000 millones en fondos europeos que espera recibir este año.
"Retrasamos en un trimestre la recuperación", indicó aunque añadió que espera un "fuerte rebote" para la segunda mitad del año, ante la mejora en las vacunaciones y la llegada de fondos europeos.
Los efectos de la tercera ola, la lentitud del proceso de vacunación y de la validación por Bruselas de los proyectos europeos, clave para recibir los fondos, explican este deterioro. El Banco de España empeoró hace unas semanas su estimación de crecimiento al 6%; la Autoridad Fiscal la recortó ayer al 6,6% mientras que la OCDE augura un 5,7% y el FMI pronostica un 6,4%.
El Ejecutivo espera que en 2023 el PIB crezca un 3,5% y en 2024 lo haga un 2,1%. Es decir, el Gobierno de Sánchez espera que el PIB precrisis se recupere a finales de 2022. Para 2023 auguran un 13,2% de paro y para 2024, un 12,7%, frente a las previsiones del FMI que alertaban de que ni en 2026 nuestro país iba a recuperar su desempleo precrisis, del 14,1%. El empleo, por su parte, registrará un avance del 4% en 2021, del 2,7% en 2022, del 1,1% en 2023 y del 0,9% en 2024.
Para este año contempla un desempleo del 15,2%, curiosamente mucho mejor al 16,9% que preveía antes. Como explicó Calviño, ello se debe a que las estimaciones contemplan que se alarguen los ERTE durante todo el año, lo que reducirá el aumento del paro en 2021. Estas serán las previsiones que acompañarán al Programa de Estabilidad que se enviará a Bruselas a finales de abril.
Calviño achacó estos problemas a la evolución de la pandemia unido al ritmo de la vacunación. Esto ha provocado un menor crecimiento ante la tercera ola y, por tanto, ha hecho mella en las previsiones del Ejecutivo que, en octubre de 2020, esperaba un crecimiento del 9,8%, del 7,2% sin incluir el impacto de los 27.000 millones en fondos europeos que espera recibir este año.
"Retrasamos en un trimestre la recuperación", indicó aunque añadió que espera un "fuerte rebote" para la segunda mitad del año, ante la mejora en las vacunaciones y la llegada de fondos europeos.
Los efectos de la tercera ola, la lentitud del proceso de vacunación y de la validación por Bruselas de los proyectos europeos, clave para recibir los fondos, explican este deterioro. El Banco de España empeoró hace unas semanas su estimación de crecimiento al 6%; la Autoridad Fiscal la recortó ayer al 6,6% mientras que la OCDE augura un 5,7% y el FMI pronostica un 6,4%.
El Ejecutivo espera que en 2023 el PIB crezca un 3,5% y en 2024 lo haga un 2,1%. Es decir, el Gobierno de Sánchez espera que el PIB precrisis se recupere a finales de 2022. Para 2023 auguran un 13,2% de paro y para 2024, un 12,7%, frente a las previsiones del FMI que alertaban de que ni en 2026 nuestro país iba a recuperar su desempleo precrisis, del 14,1%. El empleo, por su parte, registrará un avance del 4% en 2021, del 2,7% en 2022, del 1,1% en 2023 y del 0,9% en 2024.
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