Romper la barrera de los siete yuanes por un dólar, el desafío más peligroso
Gran alarma en las economías de América Latina. Una situación que puede ser especialmente delicada para Argentina. Impacto en las Bolsas de Europa y Asia. El escenario de una guerra de divisas abre un conflicto de riesgos y peligros muy serios. Wall Street tuvo su mayor caída del año.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos calificó a República Popular China como país "manipulador de divisas" y amenazó con tomar represalias para acabar con sus "injustas" ventajas competitivas en el marco del Fondo Monetario Internacional (FMI). Se abre una nueva escalada en la guerra comercial.
En un comunicado, el Departamento del Tesoro indicó que su secretario, Steven Mnuchin, "actuará con el Fondo Monetario Internacional para eliminar la ventaja competitiva creada por las últimas acciones de China".
El Tesoro tomó esa medida después de que el Banco Popular de China (BPC, banco central) dejara caer con fuerza su divisa, el yuan, de manera que para comprar un dólar ahora hacen falta siete yuanes, en lo que supone la ruptura de una barrera psicológica para los inversores y algo que no ocurría desde 2008.
A juicio del Tesoro, "el propósito de la devaluación de la moneda de China es obtener una ventaja competitiva injusta en el comercio internacional". Consideró, además, que el "patrón" de acciones de Pekín para devaluar su moneda supone una violación de los compromisos que ha alcanzado en el marco de las reuniones de líderes del G20.
El Tesoro volvió a instar al Gobierno del presidente chino, Xi Jinping, a "mejorar la transparencia del tipo de cambio y las operaciones y objetivos de gestión de reservas".
La decisión del Tesoro, una de las mayores formas de sanción que ese departamento puede imponer a un país, se produjo solo horas después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusara a Pekín de "manipulación de divisas" e instara a la Reserva Federal (Fed) a tomar medidas al respecto.
Un yuan más débil significa que los productos chinos denominados en dólares son más baratos, algo que ayudaría a frenar el efecto negativo de los nuevos aranceles estadounidenses. Una nueva guerra acaba de comenzar.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos calificó a República Popular China como país "manipulador de divisas" y amenazó con tomar represalias para acabar con sus "injustas" ventajas competitivas en el marco del Fondo Monetario Internacional (FMI). Se abre una nueva escalada en la guerra comercial.
En un comunicado, el Departamento del Tesoro indicó que su secretario, Steven Mnuchin, "actuará con el Fondo Monetario Internacional para eliminar la ventaja competitiva creada por las últimas acciones de China".
El Tesoro tomó esa medida después de que el Banco Popular de China (BPC, banco central) dejara caer con fuerza su divisa, el yuan, de manera que para comprar un dólar ahora hacen falta siete yuanes, en lo que supone la ruptura de una barrera psicológica para los inversores y algo que no ocurría desde 2008.
A juicio del Tesoro, "el propósito de la devaluación de la moneda de China es obtener una ventaja competitiva injusta en el comercio internacional". Consideró, además, que el "patrón" de acciones de Pekín para devaluar su moneda supone una violación de los compromisos que ha alcanzado en el marco de las reuniones de líderes del G20.
El Tesoro volvió a instar al Gobierno del presidente chino, Xi Jinping, a "mejorar la transparencia del tipo de cambio y las operaciones y objetivos de gestión de reservas".
La decisión del Tesoro, una de las mayores formas de sanción que ese departamento puede imponer a un país, se produjo solo horas después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusara a Pekín de "manipulación de divisas" e instara a la Reserva Federal (Fed) a tomar medidas al respecto.
Un yuan más débil significa que los productos chinos denominados en dólares son más baratos, algo que ayudaría a frenar el efecto negativo de los nuevos aranceles estadounidenses. Una nueva guerra acaba de comenzar.
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