Parte de una central eléctrica de alta tensión. (Foto: freepik.es)

La reforma del mercado eléctrico en España

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Los debates suscitados últimamente en torno al mercado eléctrico han puesto de manifiesto que es necesario abordar una reforma inminente del mercado eléctrico. La reforma del mercado eléctrico en España se configura aún más necesaria considerando que tenemos la factura de la luz más cara de Europa.

Aunque se han adoptado medidas parciales para reducir en algo el precio de la luz, estas medidas son a todas luces insuficientes. Algunas de las medidas adoptadas por España han sido una reducción de forma temporal del IVA que se aplica que ha pasado del 21 % al 10 %. A esto se sumaría una suspensión del impuesto de un 7 % a la generación eléctrica.

Son diversos los argumentos que se exponen para pedir la reforma del mercado eléctrico en España, pero uno de ellos es que las tecnologías han cambiado de forma importante en los últimos años. Por tanto, el modelo de mercado que Europa ha venido estableciendo se ha quedado obsoleto y es necesario que se actualice a la nueva realidad de la mayoría de los países europeos.

Se puede afirmar que el nivel de demanda de consumo eléctrico se mantiene al alza, pero se están produciendo cierres de centrales térmicas que dejan de ser rentables debido a que las energías intermitentes tienen una mayor presencia. El precio de estas energías en España se mantiene en los 100 euros/MWh.

Ante esta situación el objetivo para abordar la reforma del mercado eléctrico en España es crear lo que se conoce como un mercado de capacidad que permitirá fomentar la inversión en potencia firme en nuestro país. De esta forma, será posible satisfacer la demanda en los momentos en que haya una disponibilidad limitada a través de tecnologías renovables.

¿Qué aspectos influyen en el precio?

Para entender la necesaria reforma del mercado eléctrico es necesario tener en cuenta algunos factores que también afectan a este precio. Por ejemplo, el precio del gas y los derechos del CO2 tienen un efecto directo en el precio de la electricidad.

Esto es debido a que la energía se suele comprar mediante subasta de un día para otro. De hecho, en función de la cantidad de energía necesaria se suelen comprar en primer lugar las que son más baratas y menos contaminantes. No obstante, en muchos casos esta energía no es suficiente para cubrir toda la demanda y es necesario acudir a energías menos limpias como el gas y el CO2.

El precio del gas conlleva los derechos de CO2 que son dos energías de precio elevado, ya que están penalizadas por su alto nivel de contaminación. Estos son algunos de los aspectos que debemos tener en cuenta para comprender cómo se forma el precio de la electricidad.

Todas las reformas propuestas por el gobierno español y las que otros países de Europa están también defendiendo pasan por cambiar la manera de realizar la asignación de la energía y las subastas asociadas.

Es un debate en el que estaremos inmersos aún durante bastante tiempo hasta lograr un consenso y unificar criterios con Europa.
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