Nubank se convirtió en el banco más valioso de América Latina
Este mes Nubank, un banco creado en Brasil en 2013 y que opera también en Colombia y México, se convirtió en el banco más valioso de Latinoamérica, al debutar en la Bolsa de Nueva York con acciones que comenzaron cotizándose a 9 dólares, y llegaron a 10,5, alcanzando así un valor en el mercado de 50.000 millones de dólares.
El Nubank, con 48 millones de clientes, es el banco digital más grande del mundo. Su equivalente más cercano en Estados Unidos sería el Chime Financial, con 20 millones de clientes.
Esta iniciativa cuenta con tres socios fundadores: el colombiano David Vélez, la brasileña Cristina Junqueira y el estadounidense Edward Wible.
Donde hay servicios deficientes puede haber grandes oportunidades
Todo comenzó en 2012 con la llegada de David Vélez a Brasil, donde necesitó cuatro meses para abrir una cuenta bancaria, y notó que, en general, el sistema financiero descontaba mucho dinero a sus clientes por servicios deficientes.
Un año después fundó Nubank, un banco digital destinado a ofrecer servicios financieros que resolvieran las necesidades de sus clientes; y en 2014 lanzó su primer producto: una tarjeta de crédito anual, que se podía registrar a través de una aplicación del teléfono móvil.
Mientras la banca tradicional se centra en ofrecer servicios financieros que no siempre satisfacen al cliente, Nubank se puso como objetivo crear servicios que aportaran soluciones a los usuarios.
Posteriormente, desarrollaron otros productos: cuentas corrientes, cuentas corporativas, transferencias electrónicas, seguros, etc., y se expandieron a México y Colombia.
Sin embargo, desde su creación Nubank solo ha generado pérdidas, manteniéndose gracias al apoyo de fondos de inversión, que han aportado hasta 1.700 millones de dólares al desarrollo de esta empresa financiera, y entre los cuales 500 fueron de Berkshire Hathaway, el fondo de Warren Buffett.
El valor de una promesa
Si os preguntáis por qué es tan rentable comprar acciones de una empresa que solo ha dado pérdidas, la respuesta está en el mañana, y en la manera en que Nubank ha invertido sus recursos.
Nubank ha utilizado todas sus posibles ganancias en abrirse espacio en un mercado financiero como el brasileño, dominado en un 75 % por cinco corporaciones financieras: Itaú, Santander, Caixa, Bradesco y Banco do Brasil.
Se ha abierto camino utilizando todos los recursos obtenidos reinvirtiéndolos para aumentar la clientela que compra sus productos, y mejorar los servicios que se ofrecen.
No es un pionero en esta forma de invertir, solo han seguido el ejemplo de otras empresas digitales, como Amazon, que produjo pérdidas durante los primeros seis años, y ganancias moderadas en los siguientes diez.
El esfuerzo no ha sido en vano, Nubank no ha cesado de crecer desde que comenzó y, en octubre de 2021, anunció por primera vez ganancias por 135 millones de dólares.
Los que compraron acciones de Nubank a principios de diciembre en Wall Street lo hicieron porque confían en que sus acciones se van a continuar revalorizando, gracias a un banco que no va a cesar de crecer en los próximos años.
El Nubank, con 48 millones de clientes, es el banco digital más grande del mundo. Su equivalente más cercano en Estados Unidos sería el Chime Financial, con 20 millones de clientes.
Esta iniciativa cuenta con tres socios fundadores: el colombiano David Vélez, la brasileña Cristina Junqueira y el estadounidense Edward Wible.
Donde hay servicios deficientes puede haber grandes oportunidades
Todo comenzó en 2012 con la llegada de David Vélez a Brasil, donde necesitó cuatro meses para abrir una cuenta bancaria, y notó que, en general, el sistema financiero descontaba mucho dinero a sus clientes por servicios deficientes.
Un año después fundó Nubank, un banco digital destinado a ofrecer servicios financieros que resolvieran las necesidades de sus clientes; y en 2014 lanzó su primer producto: una tarjeta de crédito anual, que se podía registrar a través de una aplicación del teléfono móvil.
Mientras la banca tradicional se centra en ofrecer servicios financieros que no siempre satisfacen al cliente, Nubank se puso como objetivo crear servicios que aportaran soluciones a los usuarios.
Posteriormente, desarrollaron otros productos: cuentas corrientes, cuentas corporativas, transferencias electrónicas, seguros, etc., y se expandieron a México y Colombia.
Sin embargo, desde su creación Nubank solo ha generado pérdidas, manteniéndose gracias al apoyo de fondos de inversión, que han aportado hasta 1.700 millones de dólares al desarrollo de esta empresa financiera, y entre los cuales 500 fueron de Berkshire Hathaway, el fondo de Warren Buffett.
El valor de una promesa
Si os preguntáis por qué es tan rentable comprar acciones de una empresa que solo ha dado pérdidas, la respuesta está en el mañana, y en la manera en que Nubank ha invertido sus recursos.
Nubank ha utilizado todas sus posibles ganancias en abrirse espacio en un mercado financiero como el brasileño, dominado en un 75 % por cinco corporaciones financieras: Itaú, Santander, Caixa, Bradesco y Banco do Brasil.
Se ha abierto camino utilizando todos los recursos obtenidos reinvirtiéndolos para aumentar la clientela que compra sus productos, y mejorar los servicios que se ofrecen.
No es un pionero en esta forma de invertir, solo han seguido el ejemplo de otras empresas digitales, como Amazon, que produjo pérdidas durante los primeros seis años, y ganancias moderadas en los siguientes diez.
El esfuerzo no ha sido en vano, Nubank no ha cesado de crecer desde que comenzó y, en octubre de 2021, anunció por primera vez ganancias por 135 millones de dólares.
Los que compraron acciones de Nubank a principios de diciembre en Wall Street lo hicieron porque confían en que sus acciones se van a continuar revalorizando, gracias a un banco que no va a cesar de crecer en los próximos años.
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