Los alimentos y la gasolina debilitan a la inflación por debajo del 2%

El Índice de Precios al Consumo (IPC) de alimentos ha experimentado una disminución del 10,3% en junio, lo que implica una reducción de 1,7 puntos porcentuales en comparación con el mes anterior, según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Esta caída se debe principalmente a que los precios de las frutas, el pan y los cereales, así como de la carne, han experimentado un aumento menor en comparación con junio de 2022.

También ha influido la estabilidad en los precios de la leche, el queso y los huevos, en contraste con el aumento registrado el año anterior, y la reducción de los precios de las legumbres y las hortalizas, que habían aumentado en junio del año pasado.

En términos interanuales (junio de 2023 frente a junio de 2022), todos los alimentos han experimentado un incremento en sus precios, con la excepción de las frutas frescas (-4,2%).

Los mayores aumentos corresponden al azúcar (44,9%), la leche (+19,7%), la carne de cerdo (+15,7%), los aceites y grasas (+15,4%) y otros preparados alimenticios (+14,8%).

Por otro lado, los incrementos más moderados se han registrado en el pescado fresco y congelado (+4,0%), la carne de ave (+5,9%), el pan (+6,1%) y las frutas en conserva y los frutos secos (+6,1%).

En cuanto a los datos mensuales (entre junio y mayo de 2023), presentan una variación del 0,2%, es decir, dos décimas menos que el mes anterior. Destacan los incrementos en las patatas y sus preparados (+2,8%), las frutas frescas (+2,3%) y los aceites y grasas (+2,0%).

En la comparativa mensual, se observan cinco reducciones de precios en las categorías de legumbres y hortalizas frescas (-4,0%), café, cacao e infusiones (-1,3%), agua mineral, refrescos y zumos (-0,6%), productos lácteos (-0,1%) y cereales y derivados (-0,1%).

En resumen, la tasa de variación anual del IPC en junio se sitúa en el 1,9%, lo que representa una disminución de 1,3 puntos en comparación con mayo, mientras que la tasa anual de la inflación subyacente disminuye cinco décimas, situándose en el 6,1%.