Hollande, Merkel, Rajoy y Gentiloni, una Unión Europea de varias velocidades
El presidente François Hollande quiso enviar a la opinión pública de la Unión Europea -junto a la canciller de Alemania, Angela Merkel; el primer ministro de Italia, Paolo Gentiloni; y el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy- un mensaje en su nombre, en el de su país y en el de las cuatro potencias europeas.
La Unión Europea no es un bloque rígido. Lo esencial son los valores que se comparten. La nueva reflexión gira sobre la flexibilidad, la vieja-nueva idea de quienes avanzan más rápido y más pausado. Tiene que afianzarse un espacio político y económico en el que convivan las dos sensibilidades.
En la reunión, debates y cena en el castillo de Versalles, inevitablemente en un primer plano la salida de Reino Unido, el ascenso de los populismos tras años de crisis económica y las tensiones con los Estados Unidos de Donald Trump y la Rusia de Vladímir Putin.
En una comparecencia conjunta, cada líder pronunció un mensaje de seis minutos. No fue el formato de una conferencia de prensa, sino el de cuatro reflexiones. François Hollande subrayó que "la unidad no es la uniformidad”.
“Propugno nuevas formas de cooperación o nuevos proyectos, lo que llamamos cooperaciones diferenciadas, que hagan que algunos países puedan ir más rápido sin que otros países queden apartados ni puedan oponerse", destacó François Hollande en un encuentro antes de que la primera ministra británica, Theresa May, oficialice el Brexit, y la celebración de la cumbre de Roma que marca las seis décadas de la fundación de la Comunidad Económica Europea (CEE), la antesala de la Unión Europea.
A destacar que François Hollande abandona El Elíseo dentro de tres meses, Angela Merkel afronta elecciones legislativas en septiembre; y Paolo Gentiloni concluye la legislatura en febrero de 2018 pero permanece bajo presión de elecciones anticipadas. Mariano Rajoy es por su parte el líder más estable y con mayor margen de maniobra.
La reflexión de Mariano Rajoy
En su declaración, Mariano Rajoy afirmó que la Unión Europea es una "historia de éxito", pese a que existen "muchas incertidumbres" en este momento. Para resolverlas, dijo que España está "dispuesta" a ir "más allá" en la integración europea.
"Tenemos muchos retos pendientes por delante. Existen muchas incertidumbres y de lo que se trata es de dar respuesta a esos retos e incertidumbres", subrayó destacando que la de la Unión Europea es "una historia de éxito" a todos los niveles, "aunque haya algunos que solo quieran prestar atención a aquellas cosas que, como toda obra humana, a veces fallan".
Remarcó que es la región del mundo "con más democracia", "mayor nivel de bienestar", "primera potencia comercial del mundo" y "primera región del mundo a la hora de atender a las personas".
Por ello, pidió "defender la Unión Europea, estar unidos y dar la batalla contra quienes se empeñan en señalar los errores". Señaló que la prioridad en los próximos tiempos ha de ser atender "con más intensidad y eficacia" a los problemas ciudadanos.
A su juicio, el futuro de los países pasa necesariamente por "una más y mejor integración" entre los distintos países que conforman la Unión Europea. "En este momento, se debe mirar lejos, porque cuando la Unión Europea ha mirado lejos es cuando ha vivido los mejores momentos de su historia".
"España está dispuesta a ir más allá con la integración con todos aquellos que quieran seguir en la integración", enfatizó ahondando en el mensaje de los líderes de Francia, Italia y Alemania.
Pidió ahondar en el trabajo conjunto en la política exterior y de defensa, en la política de integración, en seguridad, en la lucha contra el terrorismo, así como profundizar en la unión económica y monetaria.
Al mismo tiempo, apuntó que es "impresncidible" profundizar en la coordinación de las políticas económicas "para que nuestras economías sean más competitivas". "Eso exige, por duras que puedan ser, reformas estructurales, porque eso irá en beneficio de todos los ciudadanos".
Finalmente, afirmó que cuando exista una mayor coordinadión en las políticas económicas europeas será el momento de hablar de la unión fiscal y de un presupuesto europeo.
La Unión Europea no es un bloque rígido. Lo esencial son los valores que se comparten. La nueva reflexión gira sobre la flexibilidad, la vieja-nueva idea de quienes avanzan más rápido y más pausado. Tiene que afianzarse un espacio político y económico en el que convivan las dos sensibilidades.
En la reunión, debates y cena en el castillo de Versalles, inevitablemente en un primer plano la salida de Reino Unido, el ascenso de los populismos tras años de crisis económica y las tensiones con los Estados Unidos de Donald Trump y la Rusia de Vladímir Putin.
En una comparecencia conjunta, cada líder pronunció un mensaje de seis minutos. No fue el formato de una conferencia de prensa, sino el de cuatro reflexiones. François Hollande subrayó que "la unidad no es la uniformidad”.
“Propugno nuevas formas de cooperación o nuevos proyectos, lo que llamamos cooperaciones diferenciadas, que hagan que algunos países puedan ir más rápido sin que otros países queden apartados ni puedan oponerse", destacó François Hollande en un encuentro antes de que la primera ministra británica, Theresa May, oficialice el Brexit, y la celebración de la cumbre de Roma que marca las seis décadas de la fundación de la Comunidad Económica Europea (CEE), la antesala de la Unión Europea.
A destacar que François Hollande abandona El Elíseo dentro de tres meses, Angela Merkel afronta elecciones legislativas en septiembre; y Paolo Gentiloni concluye la legislatura en febrero de 2018 pero permanece bajo presión de elecciones anticipadas. Mariano Rajoy es por su parte el líder más estable y con mayor margen de maniobra.
La reflexión de Mariano Rajoy
En su declaración, Mariano Rajoy afirmó que la Unión Europea es una "historia de éxito", pese a que existen "muchas incertidumbres" en este momento. Para resolverlas, dijo que España está "dispuesta" a ir "más allá" en la integración europea.
"Tenemos muchos retos pendientes por delante. Existen muchas incertidumbres y de lo que se trata es de dar respuesta a esos retos e incertidumbres", subrayó destacando que la de la Unión Europea es "una historia de éxito" a todos los niveles, "aunque haya algunos que solo quieran prestar atención a aquellas cosas que, como toda obra humana, a veces fallan".
Remarcó que es la región del mundo "con más democracia", "mayor nivel de bienestar", "primera potencia comercial del mundo" y "primera región del mundo a la hora de atender a las personas".
Por ello, pidió "defender la Unión Europea, estar unidos y dar la batalla contra quienes se empeñan en señalar los errores". Señaló que la prioridad en los próximos tiempos ha de ser atender "con más intensidad y eficacia" a los problemas ciudadanos.
A su juicio, el futuro de los países pasa necesariamente por "una más y mejor integración" entre los distintos países que conforman la Unión Europea. "En este momento, se debe mirar lejos, porque cuando la Unión Europea ha mirado lejos es cuando ha vivido los mejores momentos de su historia".
"España está dispuesta a ir más allá con la integración con todos aquellos que quieran seguir en la integración", enfatizó ahondando en el mensaje de los líderes de Francia, Italia y Alemania.
Pidió ahondar en el trabajo conjunto en la política exterior y de defensa, en la política de integración, en seguridad, en la lucha contra el terrorismo, así como profundizar en la unión económica y monetaria.
Al mismo tiempo, apuntó que es "impresncidible" profundizar en la coordinación de las políticas económicas "para que nuestras economías sean más competitivas". "Eso exige, por duras que puedan ser, reformas estructurales, porque eso irá en beneficio de todos los ciudadanos".
Finalmente, afirmó que cuando exista una mayor coordinadión en las políticas económicas europeas será el momento de hablar de la unión fiscal y de un presupuesto europeo.
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