La CE eleva al 2,8% el PIB y reduce la previsión de paro y deuda
La Comisión Europea presentó este jueves sus previsiones económicas de primavera, en las que recoge que el PIB español registrará un crecimiento del 2,8% este año y del 2,4% en 2018, frente al 2,3% y el 2,1%, de las anteriores proyecciones. De esta manera, se suma a otros organismos y mejoras las previsiones de PIB para la economía española, al tiempo que reduce ligeramente la proyección de la tasa de paro.
Así, Bruselas estima que la tasa de paro se situará en el 17,6% de la población activa en 2017 y del 15,9% el año próximo, lo que supone una décima menos de lo estimado anteriormente en ambos casos.
Para estos ejercicios, el Gobierno de Mariano Rajoy prevé alzas del PIB del 2,7% y el 2,5%, respectivamente, con una tasa de paro de 17,5% en 2017 y el 15,6% en 2018, con lo que el Ejecutivo español es más optimista que las autoridades europeas.
Mientras, Bruselas considera que España mejorará también el déficit público. Así, mientras que en las previsiones de invierno preveía que el déficit cerraría este año en el 3,5% y el 2,9% en 2018, Bruselas dice ahora que se reducirá hasta el -3,2% y el -2,6%.
Esto supone que España incumplirá con el objetivo pactado del 3,1% para el presente ejercicio y del 2,2% de la meta fijada para el próximo año.
Por el lado de la deuda, el organismo apunta que cerrará el presente ejercicio en el 99,2% del PIB, desde el 100% de la anterior previsión. Asimismo, se moderará hasta el 98,5% en 2018.
Superando expectativas
En su informe sobre España, la Comisión Europea apunta que la actividad económica continúa "superando las expectativas", apoyada en un patrón de crecimiento "más equilibrado" que en los años previos de la crisis. No obstante, apunta que el crecimiento se "estabilizará", afectado por la desaceleración esperada del consumo privado, "a pesar del repunte proyectado de la inversión y del positivo panorama externo".
En relación con el desempleo, la Comisión Europea afirma que continuará disminuyendo, al tiempo que se recuperará la tasa general de inflación, "a medida que se recupere la inflación subyacente". En concreto, la Comisión proyecta que el IPC de España cierre 2017 en el 2% y se modere hasta el 1,4% el próximo año.
La institución subraya que las "positivas" perspectivas macroeconómicas y el impacto de las medidas fiscales adoptadas por el Ejecutivo, están impulsando el descenso del déficit público y de la deuda.
Así, Bruselas estima que la tasa de paro se situará en el 17,6% de la población activa en 2017 y del 15,9% el año próximo, lo que supone una décima menos de lo estimado anteriormente en ambos casos.
Para estos ejercicios, el Gobierno de Mariano Rajoy prevé alzas del PIB del 2,7% y el 2,5%, respectivamente, con una tasa de paro de 17,5% en 2017 y el 15,6% en 2018, con lo que el Ejecutivo español es más optimista que las autoridades europeas.
Mientras, Bruselas considera que España mejorará también el déficit público. Así, mientras que en las previsiones de invierno preveía que el déficit cerraría este año en el 3,5% y el 2,9% en 2018, Bruselas dice ahora que se reducirá hasta el -3,2% y el -2,6%.
Esto supone que España incumplirá con el objetivo pactado del 3,1% para el presente ejercicio y del 2,2% de la meta fijada para el próximo año.
Por el lado de la deuda, el organismo apunta que cerrará el presente ejercicio en el 99,2% del PIB, desde el 100% de la anterior previsión. Asimismo, se moderará hasta el 98,5% en 2018.
Superando expectativas
En su informe sobre España, la Comisión Europea apunta que la actividad económica continúa "superando las expectativas", apoyada en un patrón de crecimiento "más equilibrado" que en los años previos de la crisis. No obstante, apunta que el crecimiento se "estabilizará", afectado por la desaceleración esperada del consumo privado, "a pesar del repunte proyectado de la inversión y del positivo panorama externo".
En relación con el desempleo, la Comisión Europea afirma que continuará disminuyendo, al tiempo que se recuperará la tasa general de inflación, "a medida que se recupere la inflación subyacente". En concreto, la Comisión proyecta que el IPC de España cierre 2017 en el 2% y se modere hasta el 1,4% el próximo año.
La institución subraya que las "positivas" perspectivas macroeconómicas y el impacto de las medidas fiscales adoptadas por el Ejecutivo, están impulsando el descenso del déficit público y de la deuda.
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