Dow Jones en la peor caída con desplome de Wall Street y relevo de Janet Yellen
Janet Yellen celebró la pasada semana su última reunión al frente de la Reserva Federal, la Fed (Federal Reserve System), el Banco Central de Estados Unidos. Cuatro años de prudencia y eficaz gestión, un mandato histórico al ser la primera mujer en tomar las riendas de una institució clave.
A Janet Yellen le hubiera gustado continuar. Donald Trump, sin embargo, en la obsesión por borrar todas las huellas de la etapa anterior optó por Jerome Powell. Ha dejado en sus manos la compleja, y muy delicada, misión de completar el proceso de normalización monetaria emprendido por Janet Yellen.
Jerome Powell tiene dos cuestiones arduas:
Lo primero, si la reforma fiscal de la Administración Trump tiene un efecto más intenso sobre el crecimiento de lo previsto, la Fed podría verse obligada a subir los tipos a un mayor ritmo de lo planeado. Sería un riesgo para los mercados financieros.
Lo segundo, abordar la renovación de cargos en el Comité de Mercado Abierto que decide la política monetaria de la Fed. Un tercio de los puestos está vacante tras la renuncia de Janet Yellen y la dimisión anticipàdas del vicepresidente Stanley Fischer. Los dos no quisieron seguir formando parte de la junta de gobernadores.
En este marco incierto para la economía de Estados Unidos, Wall Street se desplomó en la jornada del lunes 5 y el Dow Jones registró la mayor caída en puntos de su historia. Acabó con una con una bajada del 4,6% aunque llegó a desplomarse un 6,1% por miedo a una subida más agresiva de tipos.
Dow Jones con la mayor caída en puntos de su historia. Terminó con una bajada de 1.175 enteros, la mayor en porcentaje desde el verano de 2011. Perdió además la barrera de los 25.000 puntos. El S&P 500 retrocedió un 4,1% y el Nasdaq un 3,8%.
Atención a los primeros síntomas de cansancio. El mercado teme una subida excesivamente acelerada de los tipos de interés para evitar un sobrecalentamiento de la economía. En principio, la Fed prevé tres alzas este año pero podría anunciar más incrementos. Momento complejo en el desembarco de Jerome Powell que exige prudencia, acierto y lucidez. Eran precisamente las fuertes cualidades de la personalidad de Janet Yellen.
A Janet Yellen le hubiera gustado continuar. Donald Trump, sin embargo, en la obsesión por borrar todas las huellas de la etapa anterior optó por Jerome Powell. Ha dejado en sus manos la compleja, y muy delicada, misión de completar el proceso de normalización monetaria emprendido por Janet Yellen.
Jerome Powell tiene dos cuestiones arduas:
Lo primero, si la reforma fiscal de la Administración Trump tiene un efecto más intenso sobre el crecimiento de lo previsto, la Fed podría verse obligada a subir los tipos a un mayor ritmo de lo planeado. Sería un riesgo para los mercados financieros.
Lo segundo, abordar la renovación de cargos en el Comité de Mercado Abierto que decide la política monetaria de la Fed. Un tercio de los puestos está vacante tras la renuncia de Janet Yellen y la dimisión anticipàdas del vicepresidente Stanley Fischer. Los dos no quisieron seguir formando parte de la junta de gobernadores.
En este marco incierto para la economía de Estados Unidos, Wall Street se desplomó en la jornada del lunes 5 y el Dow Jones registró la mayor caída en puntos de su historia. Acabó con una con una bajada del 4,6% aunque llegó a desplomarse un 6,1% por miedo a una subida más agresiva de tipos.
Dow Jones con la mayor caída en puntos de su historia. Terminó con una bajada de 1.175 enteros, la mayor en porcentaje desde el verano de 2011. Perdió además la barrera de los 25.000 puntos. El S&P 500 retrocedió un 4,1% y el Nasdaq un 3,8%.
Atención a los primeros síntomas de cansancio. El mercado teme una subida excesivamente acelerada de los tipos de interés para evitar un sobrecalentamiento de la economía. En principio, la Fed prevé tres alzas este año pero podría anunciar más incrementos. Momento complejo en el desembarco de Jerome Powell que exige prudencia, acierto y lucidez. Eran precisamente las fuertes cualidades de la personalidad de Janet Yellen.
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