El crecimiento del PIB tras el estado de alarma
Los datos aportados por la Contabilidad Nacional y publicados en el Instituto Nacional de Estadística (INE) han puesto de manifiesto que el PIB español ha experimentado un crecimiento que no se vivía desde los años previos a la pandemia.
De todos es sabido que la crisis sanitaria vivida en los últimos dos años ha supuesto un impacto importante en la economía española. La paralización de la economía y el impacto que la crisis sanitaria ha tenido en algunos sectores especialmente como el turismo o los servicios han dado lugar a una bajada de los niveles de producción a niveles preocupantes.
Sin embargo, en este año se ha vivido el crecimiento del PIB tras el estado de alarma que viene a indicar una recuperación de la economía española a índices similares a antes de la pandemia.
El crecimiento del PIB tras el estado de alarma también ha supuesto un aumento de los niveles de empleo que se ha recuperado de forma importante. Tras la época de los ERTES y la destrucción de empleo que generó la pandemia, ahora parece que todo eso queda atrás.
Aspectos como el fin del estado de alarma unido al buen ritmo mostrado por la vacunación en nuestro país, así como la apertura de fronteras y la reactivación del turismo han influido de forma importante en este incremento de la producción nacional.
Componentes del PIB que más han subido
Dentro de los elementos que integran el PIB no todos han aumentado por igual. De hecho, la demanda nacional ha sido uno de los componentes que más ha aumentado y ha contribuido a este incremento del PIB.
Este crecimiento de la demanda nacional ha venido influenciado por un aumento de los niveles de consumo interno. El consumo final se ha visto incrementado a principios de año sobre todo el crecimiento de los hogares.
Por otra parte, también se ha visto incrementado el nivel de inversiones en capital tanto en el capítulo de inversión en vivienda como en propiedad intelectual o en maquinaria y bienes de equipo.
El crecimiento del PIB tras el estado de alarma también ha supuesto un incremento importante en los niveles de la demanda exterior favorecido por el crecimiento de las exportaciones.
Esto ha supuesto un aumento importante de la actividad en los diferentes sectores de actividad. Los sectores de actividad que han mostrado un mayor dinamismo han sido el comercio, el transporte y la hostelería, así como la industria manufacturera y las actividades artísticas y recreativas.
Todo indica a que esta recuperación vivida por la economía española en este año puede ser una muestra del crecimiento que seguirá manteniendo durante los próximos años. Todos los datos apuntan a una recuperación y consolidación de este crecimiento que se mantendrá si no se produce ninguna nueva situación que pueda comprometer este desarrollo.
Estos claros síntomas de recuperación contribuirán a que nuestro país pueda salir airoso de unos años complicados que nos han cambiado un poco la vida a todos.
De todos es sabido que la crisis sanitaria vivida en los últimos dos años ha supuesto un impacto importante en la economía española. La paralización de la economía y el impacto que la crisis sanitaria ha tenido en algunos sectores especialmente como el turismo o los servicios han dado lugar a una bajada de los niveles de producción a niveles preocupantes.
Sin embargo, en este año se ha vivido el crecimiento del PIB tras el estado de alarma que viene a indicar una recuperación de la economía española a índices similares a antes de la pandemia.
El crecimiento del PIB tras el estado de alarma también ha supuesto un aumento de los niveles de empleo que se ha recuperado de forma importante. Tras la época de los ERTES y la destrucción de empleo que generó la pandemia, ahora parece que todo eso queda atrás.
Aspectos como el fin del estado de alarma unido al buen ritmo mostrado por la vacunación en nuestro país, así como la apertura de fronteras y la reactivación del turismo han influido de forma importante en este incremento de la producción nacional.
Componentes del PIB que más han subido
Dentro de los elementos que integran el PIB no todos han aumentado por igual. De hecho, la demanda nacional ha sido uno de los componentes que más ha aumentado y ha contribuido a este incremento del PIB.
Este crecimiento de la demanda nacional ha venido influenciado por un aumento de los niveles de consumo interno. El consumo final se ha visto incrementado a principios de año sobre todo el crecimiento de los hogares.
Por otra parte, también se ha visto incrementado el nivel de inversiones en capital tanto en el capítulo de inversión en vivienda como en propiedad intelectual o en maquinaria y bienes de equipo.
El crecimiento del PIB tras el estado de alarma también ha supuesto un incremento importante en los niveles de la demanda exterior favorecido por el crecimiento de las exportaciones.
Esto ha supuesto un aumento importante de la actividad en los diferentes sectores de actividad. Los sectores de actividad que han mostrado un mayor dinamismo han sido el comercio, el transporte y la hostelería, así como la industria manufacturera y las actividades artísticas y recreativas.
Todo indica a que esta recuperación vivida por la economía española en este año puede ser una muestra del crecimiento que seguirá manteniendo durante los próximos años. Todos los datos apuntan a una recuperación y consolidación de este crecimiento que se mantendrá si no se produce ninguna nueva situación que pueda comprometer este desarrollo.
Estos claros síntomas de recuperación contribuirán a que nuestro país pueda salir airoso de unos años complicados que nos han cambiado un poco la vida a todos.
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