Boris Johnson supera el primer trámite para romper el acuerdo con la UE. (Foto: YouTube BBC)

Boris Johnson gana la primera votación para modificar partes del Brexit

Compartir en:
El primer ministro británico, Boris Johnson, consiguió sacar adelante la primera votación del controvertido proyecto de ley sobre el mercado interno que modifica unilateralmente el acuerdo sobre el Brexit, y que pretende aprobar en contra de lo pactado con la Unión Europea, aunque todavía se enfrentará a nuevos obstáculos.

Con el apoyo de 340 diputados y el rechazo de 263, Johnson hizo valer la amplia mayoría absoluta con la que cuenta en la Cámara de los Comunes (baja), pero no ha conseguido frenar el coro de voces cada vez mayor dentro de su propio partido que denuncian que el proyecto de ley viola el derecho internacional. 

La Cámara también ha tumbado una enmienda de la oposición laborista a la totalidad del texto, por 349 en contra y 213 a favor.

La verdadera prueba para la ley llegará la semana que viene, cuando está previsto que se voten las enmiendas a las provisiones sobre Irlanda del Norte, origen de la vulneración de lo acordado con la UE

A través de esta ley, Johnson busca reservarse el derecho a modificar de manera unilateral las disposiciones pactadas para evitar una frontera entre la región británica de Irlanda del Norte y la República de Irlanda, si bien ha asegurado que se trata de una "red de seguridad" y una "póliza de seguro" en caso de que Londres y Bruselas no logren pactar su futura relación antes del límite del 31 de diciembre.

"No tengo absolutamente ningún deseo de utilizar estas medidas. Son un seguro. Si llegamos a un acuerdo con nuestros amigos europeos, lo que creo que aún es posible, nunca serían invocadas", argumentó  Johnson ante los diputados antes de que se llevase a cabo la votación.

Johnson intervino para defender el texto con el argumento de que es un "seguro" para evitar que Irlanda del Norte quede desligada comercialmente del resto del país en caso de que Londres y Bruselas no logren pactar su futura relación antes del límite del 31 de diciembre.

Según el jefe de Gobierno, Bruselas amenaza con vetar el comercio de productos alimentarios y agrícolas británicos en caso de que se produzca un Brexit sin acuerdo. "Están amenazando con crear una frontera aduanera en nuestro propio país", entre Irlanda del Norte y Gran Bretaña, señaló.

Durante su intervención parlamentaria, el primer ministro también ha acusado a la Unión Europea de utilizar el protocolo para Irlanda del Norte que se acordó el pasado año como carta negociadora para agregar presión sobre el Reino Unido en las actuales negociaciones de la futura relación.

Ante la posibilidad de que se desencadenen escenarios como ese, el primer ministro ha considerado necesario reservarse el derecho a alterar el acuerdo alcanzado el pasado octubre, que establece controles en el paso de mercancías entre Irlanda del Norte y el resto de regiones británicas (Escocia, Gales e Inglaterra) a fin de mantener sin fricciones la aduana terrestre con la República de Irlanda.

"Irlanda del Norte es parte del territorio aduanero del Reino Unido [...] no podemos tener una situación en la que las fronteras mismas de nuestro país puedan ser dictadas por una potencia extranjera u organización internacional. Ningún primer ministro británico, ningún gobierno, ningún parlamento podría aceptar tal imposición", recalcó en su intervención para convencer al resto de miembros del Gobierno.

Compartir en: