El Banco Central no pudo evitar el derrumbe del Shanghai Composite (CSI)
Investigación médica a contrarreloj en el epicentro donde surgió todo. Lunes a la vez de gran complejidad en las Bolsas de Europa. En China, el Banco Central no pudo evitar el desplome. El coronavirus, un mazazo económico. A subrayar que no ha existido secretismo en China y las medidas adoptadas han sido inmediatas y drásticas. Es el perfil más positivo de una crisis negativa y peligrosa en su alcance político y económico.
El Shanghai Composite Index (CSI) se hundió un 7,72% después de permanecer más de una semana cerrada por la festividad del Nuevo Año Lunar. El Banco Central de China, impotente para revertir la situación.
El Shanghai Composite Index cerró con el mayor desplome en cerca de cuatro años tras permanecer cerrado una semana por la festividad del Nuevo Año Chino. Se puede ya decir que el virus de Wuhan ha paralizado al país. El Banco Central anunció la mayor intervención del mercado en un día desde 2004. Fue una inyección de 1,2 billones de yuanes (unos 157.000 millones de euros).
La crisis no está cerrada. La Bolsa de Shanghai cerró en rojo con un derrumbe de -7,72% y 2.746 puntos. Ha perdido 393.000 millones de dólaresde capitalización. Varapalo aún mayor en el parqué de Shenzhen, la segunda Bolsa más importante de China, con un derrumbe -8,8%.
El epicentro de una tormenta sanitaria, con implicaciones económicas, está en China. La situación en las Bolsas de Asia evolucionó de forma más favorable. El Hang Seng China Enterprise de la Bolsa de Hong Kong mostró señales positivas. El Hang Seng asumió los efectos del coronavirus. El Kospi de Séul tuvo un comportamiento similar En Japón, el Nikkei de la Bolsa de Tokio, se produjo un -1,01% y los 22.971 puntos La Bolsa de Australia en un -1. El coronavirus impactó también al mercado de divisas. El yuan chino se ha dejado un 1,2% y amenaza con perder el nivel los 7 dólares. Las expectativas siguen abiertas de un momento delicado.
El Shanghai Composite Index (CSI) se hundió un 7,72% después de permanecer más de una semana cerrada por la festividad del Nuevo Año Lunar. El Banco Central de China, impotente para revertir la situación.
El Shanghai Composite Index cerró con el mayor desplome en cerca de cuatro años tras permanecer cerrado una semana por la festividad del Nuevo Año Chino. Se puede ya decir que el virus de Wuhan ha paralizado al país. El Banco Central anunció la mayor intervención del mercado en un día desde 2004. Fue una inyección de 1,2 billones de yuanes (unos 157.000 millones de euros).
La crisis no está cerrada. La Bolsa de Shanghai cerró en rojo con un derrumbe de -7,72% y 2.746 puntos. Ha perdido 393.000 millones de dólaresde capitalización. Varapalo aún mayor en el parqué de Shenzhen, la segunda Bolsa más importante de China, con un derrumbe -8,8%.
El epicentro de una tormenta sanitaria, con implicaciones económicas, está en China. La situación en las Bolsas de Asia evolucionó de forma más favorable. El Hang Seng China Enterprise de la Bolsa de Hong Kong mostró señales positivas. El Hang Seng asumió los efectos del coronavirus. El Kospi de Séul tuvo un comportamiento similar En Japón, el Nikkei de la Bolsa de Tokio, se produjo un -1,01% y los 22.971 puntos La Bolsa de Australia en un -1. El coronavirus impactó también al mercado de divisas. El yuan chino se ha dejado un 1,2% y amenaza con perder el nivel los 7 dólares. Las expectativas siguen abiertas de un momento delicado.
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